LOS BENEFICIOS DE LA MANTECA DE KARITÉ
De Seguro has oído hablar de la Manteca de Karité, ya que sus propiedades para la piel son muy conocidas en el mundo de la belleza. Cleopatra fue la primera "beauty addict" de la cosmética natural. Ella también tenía sus cremas naturales y ecológicas contra el envejecimiento. Utilizaba un ungüento contra las arrugas compuesto de incienso, cera, aceite de moringa y ciprés. Se dice que no era una mujer dotada de una belleza extraordinaria, pero guardaba en su tocador aceites y maquillajes que incluso hoy serían revolucionarios. Usaba aloe vera en sus famosos baños con leche de burra y la manteca de karité para hidratar su piel.
¿Qué es y de dónde se obtiene?
Proviene de las nueces que son fruto del árbol karité (Vitellaria paradoxa o Butyrospermum parkii), que se da en Sudán, Mali, Burkina Faso o Costa de Marfil. La aplicación de la manteca de karité para la cara se ha llevado a cabo desde hace siglos ( como lo hacía Cleopatra).
Su obtención es relativamente sencilla. Estos se lavan, se trituran, se tuestan y se baten a mano para obtener ese preciado bálsamo color marfil que es la manteca de karité. De esta manera se consigue una manteca sin refinar y de primerísima calidad que posteriormente se puede utilizar en cosmética. Se espera entre 12 a 15 años para obtener los frutos.
Su composición la hace perfecta para su uso sobre la piel, pues tiene ácidos (oleico 46%, palmítico 4%, linoleico 6% y esteárico 43%, ) y esteroles (como el spinasterol o el estigmasterol). También tiene un alto contenido en vitaminas(como la A y la E, que aportan hidratación, revitalización y efecto calmante a la piel) y triterpenos antiinflamatorios que previenen el envejecimiento prematuro.
¿Cuáles son los beneficios para la piel y los usos en la cosmética?
La manteca de karité es ideal para pieles secas, sensibles, reactivas, atópicas o con psoriasis: En cuanto te contemos sus beneficios para la dermis, te vas a enamorar de ella:
- Repara la piel: gracias a sus componentes estructurales, es capaz de proteger la piel y repararla en caso de daño. Lo que la hace perfecta para pequeñas cicatrices, estrías o marquitas.
- Tiene un alto poder hidratante y emoliente de la piel mejorando visiblemente su elasticidad y flexibilidad. Nutre e hidrata la piel no solo en la cara, sino también en manos y pies. Incluso se utiliza manteca de karité para el pelo en mascarillas y cremas hidratantes.
- Por sus propiedades cicatrizantes y antiinflamatorias es muy útil en quemaduras leves y eritemas solares. Resguarda de agresiones externas: cuidando la piel para que situaciones medioambientales adversas como el frío (para el que hay que cuidar el rostro de manera especial) o el calor no la dañen.
- Previene y trata irritaciones de la piel como eccemas, dermatitis del pañal así como la aparición de úlceras en personas con movilidad reducida o encamadas.
- Tiene efecto antiedad: esta propiedad la convierte en perfecta para su uso en cremas que luchen contra las arrugas y el fotoenvejecimiento.
- Para el cabello es un excelente tratamiento anti-encrespamiento y reparador de cabellos secos y quebradizos que vuelven a lucir suaves y brillantes. (Se utiliza como una mascarilla, con el cabello húmedo y después de una media hora se retiran los restos con el champú habitual)
- Previene la formación de estrías en embarazadas y dietas de adelgazamiento.
- Evita la aparición de grietas en el pezón durante la lactancia.
La manteca de karité gracias a sus propiedades sobre la piel es todo un acierto.
Encontrá este maravilloso ingrediente en nuestras mascarillas de: manos, pies y cabello.